Carta de un padre cuyo hijo denunció torturas ante Garzón

Estimados amigos:

Reconozco el trabajo que desarrolla vuestra institución, así como no dudo de la intención que os anima a participar en la campaña de apoyo a Garzón. Sin embargo, me dirijo a vosotros para comunicaros que me resulta imposible, y hasta nauseabundo, participar en esa campaña de apoyo a Garzón, a quien hago responsable de las torturas sufridas por mi hijo. Este juez provocó, alentó y encubrió las torturas que mi hijo padeció. Este juez ordenó su detención arbitraria, lo mantuvo incomunicado durante cinco días en manos de la policía e hizo oídos sordos a los testimonios de torturas realizadas por mi hijo ante él.

Mi hijo tenía veinte años recién cumplidos cuando se lo llevaron de casa esposado como a un criminal, a las dos y media de la madrugada del 31 de Marzo del 2009. Tras cinco días en manos de la policía, el juez lo dejo en libertad condicional. No olvidare nunca el rostro de espanto, dolor y tristeza en el semblante de mi hijo, cuando tras permanecer doce horas ante las puertas de la Audiencia Nacional, pude abrazarle. Mi hijo había tenido que ser atendido en el hospital Gregorio Marañon de Madrid durante su detención e incomunicación, había perdido nueve kilos de peso en los cinco días.

La mañana del día siguiente, tras pagar la fianza de 10000 euros, presentamos la denuncia de torturas ante el juzgado de San Sebastián. Una vez hecho esto, y sacando fuerzas de no sé dónde y ante la convicción de que ello pudiera ayudar a sus compañeros detenidos y entonces encarcelados, realizó unas declaraciones públicas en una rueda de prensa celebrada en un hotel de San Sebastián, en la que denunció su detención y la de sus compañeros, así como el trato recibido en manos de la policía.

Nadie en mi vida me ha hecho más daño que Garzón.

Sin embargo, debo agradecer a Garzón el haber tenido la oportunidad de reconocer en mi hijo el joven que yo he deseado que sea: solidario con los demás, coherente con sus principios (que también son los míos), crítico con esta sociedad, comprometido con las causas justas y responsable de sus actos.

Estas son pues las razones que me impiden firmar en su campaña de apoyo al juez Garzón. Espero seguir poder participando en otras campañas que desarrolléis en el futuro y a la que sea invitado.

Joserra Altzelai Sagasta


Hola JOSE RAMON

Tras las últimas noticias al respecto, te enviamos este mensaje para informarte de la postura de Amnistía Internacional ante la acusación al Juez Baltasar Garzón por investigar los crímenes franquistas.

Amnistía Internacional considera insólito que el juez Garzón pueda ser juzgado por investigar las desapariciones de más de 100.000 personas ocurridas durante la Guerra Civil y la dictadura franquista.

La “Ley de Amnistía de 1977” ha sido invocada para perseguir al único juez que ha intentado dar respuesta a víctimas de desaparición forzada y sus familias. Si este juicio se produce, será la primera vez en todo el mundo – al menos que tengamos constancia en Amnistía Internacional - que un magistrado, en democracia, es sentado en el banquillo por intentar conseguir verdad, justicia y reparación para las víctimas de crímenes internacionales. Además, enviará un mensaje tremendamente negativo a otros jueces que lo intenten, tanto en España como en el resto del mundo.

Las normas internacionales de derechos humanos dicen claramente que el crimen de desaparición forzada no prescribe y entorpecer su investigación es un delito, por tanto ninguna "Ley de Amnistía" puede contradecirlas.

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Esteba n Beltrán
Director Amnistía Internacional España