El problema viene a ser el de siempre; nadie puede probar la aplicación de la bolsa, los golpes con un listín de teléfonos, las vejaciones, insultos,… Y menos aún cuando los jueces miran hacia otro lado, negándose a investigar hasta los casos más escandalosos. A pesar de la obviedad del asunto, hay quien se indigna y decide que lo que hay que hacer es actuar contra las víctimas por manchar la imagen del cuerpo benemérito.
CCOO recoge en su tabla de reivindicaciones laborales a negociar con el Gobierno ilegítimo de Gasteiz, que se actúe de oficio contra las denuncias de tortura en las comisarías de
No me coge de sorpresa que este sindicato defienda a los supuestos torturadores en vez de hacerlo a las víctimas por malos tratos en dependencias policiales. Hace pocos meses, este mismo sindicato defendía junto a UGT el indulto para varios agentes condenados por infligir torturas a varios detenidos.
Por algo dijo lo que dijo Calvo Sotelo en el mitin que protagonizó en el frontón Urumea de Donosita cuando lanzó la famosa proclama; «antes roja que rota».
De lo primero que dices, eso de que según el Guardia Civil "negó" pero luego dijo que había pasado lo "normal", terror me da. Porque fíjate que le creo. Que lo "normal" en estos casos es la tortura.
ResponderEliminarA la segunda parte, estoy alucinada, no sabía nada.